Mis Libros

viernes, 10 de junio de 2011

Perversión 32

Ellos se sentían, a pesar de la distancia podían casi olerse, algunas veces llegaban a intuirse: parecía que eran el uno para el otro. 
Un día quedaron de verse olvidando que ambos eran ciegos. 

Óptica retrospectiva sobre la necedad del amor


No hay comentarios:

Imágenes de esta perversión